Historia Loto Fortuna

En lo que fue tomado como un voto de confianza en el Departamento de Antioquia y su empresa modelo, la beneficencia, la gobernación de La Guajira entregó a esta sección del país, la administración y comercialización de su lotería.

Mediante ordenanza 006 del 16 de marzo de 1999, la asamblea de La Guajira facultó al gobernador del departamento para suscribir un convenio interadministrativo para la explotación de su producto. De acuerdo con lo establecido por la Ley 64 de 1923, la explotación económica del monopolio rentístico de los juegos de suerte y azar corresponde a los departamentos, bien en forma directa o a través de terceros, con la finalidad social de destinar sus rentas a los servicios de la salud.

En desarrollo de ese convenio, el 11 de mayo de 1999, se llevó a cabo el lanzamiento de la lotería Loto Fortuna, en un evento presidido por los gobernadores de Antioquia, Alberto Builes Ortega y de La Guajira, Álvaro Cuello Blanchar; los gerentes de BENEDAN, Jonás Flórez Ardila y de la lotería de La Guajira, Mauricio Henríquez Mesa.

Loto Fortuna, era una lotería de modalidad Loto, en la cual el apostador elige seis números de una posibilidad de 36. Era preimpresa, y su atractivo lo constituyó la acumulación de los premios que no quedaron en poder del público para próximos sorteos, el acierto de los números en cualquier orden y la posibilidad de millonarios premios para cuatro categorías: aciertos de 6, 5, 4 y 3 números.

El producto, que se promocionó con frases publicitarias como "Loto fortuna, cada semana te hará rico", inició con un acumulado de 350 millones de pesos, un costo de mil pesos y sorteos los martes, a las 10 de la noche, con transmisión en directo por la televisión regional.

La diosa Fortuna, la deidad mitológica que presidía los sucesos de la vida distribuyendo riquezas a manos llenas, se le apareció por primera vez, a un comerciante de uno de los barrios más humildes de Medellín que cobró 570 millones. Posteriormente un campesino del municipio de Andes, se encontró una "guaca" y no propiamente con narigueras y otros adornos, al ganarse el Loto Fortuna con un acumulado de 590 millones de pesos. Y el último que se lo ganó, fue otro medellinense, precisamente el 28 de marzo de 2000, día en que se jugó el primer partido de las eliminatorias para el Mundial de Japón y Corea entre Colombia y Brasil. si bien en ese partido no hubo anotaciones, el ganador del Loto ganó la partida y con "gol olímpico", pues se echó al bolsillo 740 millones de pesos.

Fuente: Una historia bien jugada, pág.62, 2011